¿Ángeles?
Los ángeles, son
mensajeros de dios; dice la Biblia. Ante el salvaje asalto de la tecnología, sobre
la psique humana, están más que nunca: de moda. Nadie sabe si son almas; u otro tipo de seres,
se comunican en sueños, o se materializan. Lo cierto es: traen un mensaje
divino, o bien representan una facultad espiritual.
Estos seres
aparecen desde los albores de la civilización. Ya están plasmados en las
pinturas rupestres, desde hace unos 40,000 años. Los persas, hindúes y egipcios
los consignan en su literatura. Por supuesto, existen en las tradiciones
Aztecas y Mayas. Todas las religiones los poseen. La evidencia es clara; estos
intermediarios, entre dios y los hombres (reales o no) son necesarios para; la
mente humana.
Hay ángeles buenos
y malos (caídos por sus errores). Es la moda atribuir especialidades a los ángeles;
virtudes como; la paciencia, humildad, generosidad, castidad, paciencia, templanza
o la caridad. Los adivinos y magos, siempre atentos al negocio; aseguran tener
un poder de convocatoria especial; sobre el ángel de la abundancia, o del amor. ¿Habrá un ángel de los goles? se preguntan muchos el día de hoy.
Los especialistas
en Angeología, tienen innumerables nombres para ellos, y tienen todo tipo de
invocaciones para lograr sus favores. Estos
seres extraordinarios, son un consuelo para muchas personas, que imaginan que después de todo; dios si los
escucha, aunque sea con un intermediario.
Se entiende que
los ángeles, nunca fueron humanos. Por ello, son distintos a los santos, que
pueden de igual manera, representar alguna virtud o protección, pero que algún día
fueron personas.
A los ángeles se
les atribuye el ser eternos, incorpóreos y con género. El tema del si un ángel es
femenino o masculino, levanta cejas entre algunos creyentes, ya que no tienen
relaciones sexuales, ni genes. Aunque
todos tienen una especial comunicación con dios, existen jerarquías entre
ellos, “son lo mismo pero no iguales”.
En último
análisis, los ángeles, más que humanos
divinizados; o partes de dios humanizadas: son energías psíquicas. Impactan y
transforman, la mente y el alma. Una manera, más ecuménica, de entender o buscar
a dios.
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